En la Ciudad de Buenos Aires, el subte forma parte de la rutina diaria de millones de personasSin embargo, cada avance trae aparejado un costo inmediato: usuarios que deberán modificar su rutina y convivir con demoras adicionales. Y este lunes, un nuevo cierre afectará a quienes dependen de una de las líneas más concurridas de la red.
En paralelo, los trabajos también alcanzaron a la estación Plaza Italia, que desde hace semanas permanece fuera de servicio. Se trata de una muestra de cómo las obras avanzan en distintos puntos de la ciudad, con un calendario que seguirá extendiéndose en los próximos meses.
¿Qué estación será la próxima en sumarse a la lista de cierres temporales?
La respuesta impactará directamente en la Línea B, una de las más utilizadas por los pasajeros que se desplazan entre el norte y el centro de la Capital. Desde este lunes 25 de agosto, la estación Carlos Gardel permanecerá cerrada aproximadamente por dos meses para permitir una renovación completa de su infraestructura.
Los trabajos incluirán impermeabilización, pintura, recambio total de pisos, nuevas luces led, mobiliario, señalética, señalización braille y la restauración de diez murales ubicados en vestíbulo y andén. «El plan busca mejorar la experiencia de viaje y recuperar el valor patrimonial de los espacios», indicaron desde SBASE.
El proyecto abarcará accesos, galerías de escaleras, vestíbulos y andenes, con la promesa de transformar el entorno en un lugar más moderno y con mayor iluminación. Para los usuarios, implicará reacomodar recorridos y buscar combinaciones alternativas durante al menos ocho semanas.
Dentro del mismo plan, once estaciones ya fueron puestas en valor, entre ellas Castro Barros, Lima, Acoyte y San Martín. Además, se renovaron trece paradores del Premetro y continúan las obras en otros puntos, como Loria, Río de Janeiro, Piedras y Congreso en la Línea A, o Uruguay y Malabia en la Línea B.
Las próximas etapas incluyen licitaciones para Medrano y Ángel Gallardo (Línea B), Lavalle e Independencia (Línea C), y General Urquiza y Entre Ríos (Línea E). En todos los casos, el esquema es el mismo: cierres temporales con la expectativa de una reapertura que ofrezca mejores condiciones para los pasajeros.
La estación Carlos Gardel, ubicada en pleno Abasto, será ahora el foco de esta transformación. Y durante dos meses, quienes la utilizan a diario deberán buscar otras puertas de entrada al subte, con la certeza de que, una vez finalizadas las obras, el histórico andén volverá renovado.